Josephine, la perra, también conocida como “Pheenie”, se quedó atrás después de que su dueño fuera deportado. Encontró refugio detrás de un contenedor de envío en un depósito de chatarra, que le ofreció un mínimo de protección contra el calor y la lluvia. Durante 9 años de soledad, sobrevivió comiendo las sobras y las migajas que le daban los habitantes del pueblo. Pero el tiempo finalmente la alcanzó.
Como resultado del estrés y la negligencia prolongados, la salud de Pheenie había empeorado cuando era una perra mayor. Había sido atropellada por un camión y perdió el ojo derecho, además de sufrir una infección de la médula espinal, problemas dentales que se estaban deteriorando, una infección del tracto urinario y muchos tumores dolorosos en los senos.
Esta terrible película sigue a los voluntarios de Hope For Paws mientras intentan ayudar a Pheenie a salir de su solitaria existencia. A pesar de la dificultad del procedimiento, Pheenie finalmente reconoció que alguien finalmente había llegado para salvarla en sus años dorados. Su alivio fue evidente cuando abrazó a sus salvadores, con una expresión abatida en su rostro.
Pheenie fue puesta en un programa de acogida permanente para satisfacer sus crecientes demandas médicas. Durante 5 hermosos meses, disfrutó de una vida alegre, mimada y sin preocupaciones en la enorme granja de su hogar adoptivo hasta morir en la vejez. A pesar de su desafortunada vida de escasez y reclusión, los últimos días de Pheenie estuvieron llenos de un amor abrumador. Descansa en paz, Fenie.
